Según Trichet la competitividad es (web, inglés) la habilidad de un país para conseguir mejoras sostenibles en los estándares de vida y oportunidades de trabajo para sus ciudadanos; aquí influyen los niveles de precios (inflación) y los costes unitarios del trabajo.
Es natural que existan diferencias de inflación a lo largo de la zona euro, debidos en muchos casos a políticas macroeconómicas inapropiadas o a booms de la demanda interna financiados con deuda.
Sin embargo utilizar esta inflación nacional, y no la de medio plazo de la UE* o la productividad, como referencia para revisar los costes unitarios del trabajo** genera una espiral inflacionista que lleva a una pérdida de competitividad, vía costes unitarios del trabajo, y a un aumento del desempleo (V.g. España).
Por ello, desde la perspectiva del ECB es fundamental, mantener políticas fiscales y económicas dentro de un marco macroeconómico similar así como un conjunto de indicadores que inicien determinados procedimientos de vigilancia a nivel europeo, si éstos alertan de una posible pérdida de competitividad nacional.
El EURUSD se mantiene en 1,3750 mientras el Brent sube casi 2 USD ante el aumento de las tensiones en Libia hasta los 114,71 USD/barril.
*El objetivo de menor pero cercano al 2% del ECB.
**Indexación que sólo ocurre en la economía española (entre las 4 grandes economías del euro).